No se ha acabado. La ofensiva del sector convencional contra las energías renovables que tanto eco ha encontrado en la actuación del Gobierno no se ha dado por terminada. Mirando el panorama desolador que nos rodea cabría pensar que nada queda por destruir y que en cualquier momento UNESA podría emitir el último parte: “Cautivo y desarmado el sector renovable, las tropas convencionales han alcanzado sus últimos objetivos. La guerra ha terminado”. Pues no, al parecer no es suficiente con las miles de víctimas que se han cobrado: desde los pequeños inversores, que simplemente se creyeron -¡ingenuos ellos!- lo que decía en un tiempo el Boletín Oficial del Estado para ser abocados a la ruina por los decretos que han ido desfilando posteriormente por ese mismo BOE, hasta los grandes fondos de inversión de los países más importantes, que pensaban que este era un país serio, y que ahora buscan en los tribunales internacionales la reparación del daño que esta guerra de la sinrazón egoísta contra la lógica sostenible ha provocado, perdón, está provocando. …
http://www.energias-renovables.com/articulo/la-guerra-a—no-ha-20130306